Para preparar las hojas de maíz

Remoja las hojas de maíz en agua caliente, en una olla grande o en el fregadero de tu cocina. Coloca un plato sobre ellos para pesarlos y que queden completamente sumergidos. Déjalos en remojo durante al menos una hora.

Para hacer la salsa

Coloca los chiles en una cacerola pequeña y cúbralos con agua. Llevar a fuego lento a fuego medio-alto y dejar cocinar durante unos 10 minutos. Escurre los chiles y reserva 2 tazas del líquido de remojo. Coloca los chiles, el ajo, la cebolla y el líquido de remojo en la licuadora y procesa hasta que quede suave. Sazona con sal y pimienta y cuela. Deberías terminar con unas 3 tazas de salsa.

Para hacer el relleno

Escurre la yaca. Enjuaga y da golpecitos con toallas de papel. Corta el corazón de la yaca (punta de las piezas triangulares) y corta las piezas por la mitad.

Calienta 1 cucharada de aceite en una sartén grande a fuego medio.

Agrega el ajo picado y cocina por 1 minuto, revolviendo con frecuencia. Agrega la yaca y cocina de 3 a 4 minutos o hasta que comience a dorarse. Vierte 1 ½ tazas de salsa de chile guajillo y reduzca el fuego a bajo-medio. Cocine a fuego lento durante 20 minutos o hasta que la yaca comience a descomponerse y la salsa se haya espesado un poco. Use un tenedor para triturar la yaca mientras se cocina. Sazone con sal y pimienta y deje enfriar.

Para hacer la masa

Batir el aceite de coco, a velocidad media-alta, con una batidora eléctrica durante 1 minuto. Agrega el polvo de hornear, el comino, la sal y bate durante 1 minuto para incorporarlo al aceite de coco.

Agrega la mitad de la masa harina al tazón, vierte la mitad del caldo de verduras y bate para incorporar. Después de que esté completamente incorporado, agrega la otra mitad de la masa harina, el caldo de verduras y 1 ½ tazas del puré de chile guajillo. Batir a velocidad baja hasta que esté bien mezclado. Debe tener la consistencia de una masa de torta espesa. Si es necesario, agrega más caldo de verduras hasta obtener esa consistencia. Prueba la masa y agrega más sal si es necesario. Debe quedar un poco salado.

Para tamales más ligeros y esponjosos, deje reposar la masa durante una hora en el refrigerador. Sacar la masa del frigorífico y batirla añadiendo suficiente líquido para que adquiera la consistencia que tenía antes.

Retira las hojas de maíz del agua y colóquelas sobre toallas de papel. Reserva las hojas más grandes para envolver los tamales y las pequeñas para forrar la vaporera.

Para configurar su vaporera

Llena el fondo con agua asegurándose de que el agua no toque la rejilla de la vaporera. Cubra la rejilla y los lados de la olla al vapor con hojas de maíz. Dejar de lado.

Para envolver los tamales

Retira 24 tiras delgadas de lápiz de las hojas de maíz y déjalas a un lado. Toma una cáscara y seca el exceso de agua con una toalla de papel. Coloca la hoja en su mano con el lado afilado hacia afuera y el lado liso hacia arriba. Con una cuchara, esparce 2-3 cucharadas de la masa (¼ de pulgada de espesor) sobre la hoja de maíz, formando un cuadrado de 3 a 4 pulgadas. Deje un borde de al menos 3/4 de pulgada a cada lado del cuadrado.

Coloca 1 ½ cucharada del relleno en el centro de la masa. Junte los dos lados largos de la hoja de maíz, esto hará que la masa rodee el relleno y enrolle en la misma dirección alrededor del tamal (si la hoja es demasiado pequeña, doble uno de los lados largos hacia el centro y luego doble el otro lado largo hacia arriba). Doble hacia abajo la sección vacía de la hoja de maíz, formando un fondo cerrado. Esto dejará la parte superior del tamal abierta. Ata con una tira de hojas de maíz para asegurar el fondo del tamal.

Coloca el tamal en la vaporera verticalmente, apoyado contra el costado de la olla, con el extremo abierto hacia arriba. Repite este proceso hasta que te quedes sin masa y todos los tamales estén en la vaporera. Cúbrelos con una capa de hojas de maíz. Si la vaporera no está llena, llena los espacios vacíos con más hojas de maíz. Tapa la olla y deja hervir el agua. Baja el fuego a medio y cocina por 40 minutos. Revisa los tamales, cuando se separan fácilmente de la hoja de maíz significa que están listos. Si no están cocidos, cocina al vapor durante 10 minutos más y vuelve a comprobar.

Retira la vaporera del fuego y deja reposar tapado durante 10 minutos. Destapa y deja enfriar durante al menos una hora. No te alarmes si los tamales parecen muy blandos. A medida que se enfríen, se reafirmarán.