En un tazón grande combine la harina, el salvado de trigo, el germen de trigo, el polvo de hornear, la sal y mezcle bien. Agregue manteca vegetal y use sus dedos para frotar la manteca vegetal en la mezcla de harina hasta que se incorpore por completo.
Vierta el agua y mezcle con un tenedor hasta que quede. Si la masa está demasiado seca, agregue un poco más de agua.
Saque la mezcla en una tabla de cortar y amase hasta que quede suave (alrededor de 3-4 minutos). La masa debe ser suave y elástica, pero no tan suave como la masa de pan.
Cubra la masa con una envoltura de plástico y deje reposar durante al menos 1 hora. (Cuanto más tiempo descanse la masa, más suaves serán sus tortillas).
Divida la masa en 12 partes iguales y forme bolas. Calienta una sartén de hierro fundido o comal a fuego medio-alto.
Espolvorea harina sobre tu superficie de trabajo, aplana la bola de masa con la mano. Usando un rodillo, comience a rodar hacia adelante y hacia atrás a través de la bola, girándola ligeramente cada vez y rociando más harina según sea necesario, hasta que la masa se haya estirado para formar un círculo grande y delgado. Intenta enrollarlo lo más delgado que puedas.
Coloque la tortilla sobre el comal y voltéela después de 30 a 40 segundos. La tortilla debería burbujear casi inmediatamente. Cocine 30 segundos más por el otro lado y retire de la sartén. Tenga cuidado de no cocinar demasiado las tortillas o se volverán crujientes. Retire las tortillas de la sartén y colóquelas en un calentador de tortillas o una toalla de cocina.
Repite este proceso con el resto de la masa.